miércoles, 27 de abril de 2005

Neutralidad

Nuestra larga historia de neutralidad no es bien vista
por ninguno de los bandos definidos de guerreros alados.
¿Por qué tenemos que aliarnos y contra quién?
¿A costa de qué o qué o qué?

Ven, demos una vuelta por el jardín
mientras ellos, que son inmortales,
asumen con seriedad el tonto juego
de tratar de asesinarse entre ellos.
Ven, venimos luego,
ningún ángel nos extrañará.

domingo, 17 de abril de 2005

Algo que no se entiende

¿Cómo desplazarse a través de un tiempo homogéneo,
que no deja un espacio sin compresión,
que no deja un instante sin iluminación,
que no deja un alma sin peso?
¿Cómo encontrarte si el vacío tornóse bruma,
y la bruma se ha espesado tanto casi como un muro?
¿Cómo reconocerte si te has vuelto un sistema extremadamente complejo,
un todo que es mayor a la suma de sus partes,
con múltiples niveles, con relaciones intrincadas,
con propiedades emergentes,
bellamente auto-organizada?

jueves, 7 de abril de 2005

Tiempos paralelos (II)

Las letras empezaron a flotar mágicamente
sobre el fondo blanco
y la metapropiedad de la hoja era convertirse
en una unidad alucinante.
Se veía como cuando ilustran los sueños
en los programas de televisión,
que ponen un lente que produce que la imagen se vea
difuminada y reluciente.
Así se veía, las letras sobre el fondo blanco,
como en un sueño,
como cuando uno ve borroso y está borracho
-supongo que así se ve,
porque nunca lo he experimentado.
Así se veían estas letras, cuando te las estaba escribiendo,
cuando me preguntaba otra vez si te he visto antes
y el reloj de nuevo se rehusaba a marchar hacia delante.

miércoles, 6 de abril de 2005

Tiempos paralelos

Y el reloj empezó a andar hacia atrás.
El artefacto marca las 11:45:55 a.m.
como la hora oficial de mi cuarto,
pero al compararlo con la hora oficial de la República,
la que dice que son las 12:49:15 p.m.
y con la cual estaba sincronizada
hace una hora o un poco más,
según me había cerciorado
(porque es que "yo" soy obsesivo),
se hacen evidentes 63 minutos y 20 segundos de diferencia,
lo cual quiere decir, si no estoy mal,
que el reloj empezó a andar hacia atrás
hace 31 minutos y 40 segundos,
es decir, a las 12:17:35 p.m.

Esto sólo demuestra que mi cuarto y, por ende,
todo lo que realmente me concierne,
sucede en mi propio universo paralelo,
como si no fuera suficiente con el hecho
de que mi pie derecho sufra de angustia.

Mañana no sabré si es hoy,
no sabré si este día fue ayer,
no sabré hace cuánto vi tus ojos con amor,
no sabré siquiera si ya los vi por primera vez.