He puesto tanto empeño
en mi etérea membrana protectora
que ahora sueño que soy frontera:
Me diluyo,
soy la piel infranqueable
de una burbuja guerrera.
Me diluyo
y ni siquiera es dentro de ella.
Sin robarle la llave
a los demonios de Maxwell
podrías entrar cuando quieras.
Sin usar la daga,
sin aprovechar un descuido,
sin domesticar una quimera,
rasgarías mi escudo
con tu sola presencia.
Pero una grieta en mis barreras bastaría
para que ya no me encontraras nunca
detrás de ellas.
Pues a través de una simple grieta en mis barreras
se escaparía
como un soplo
mi existencia.