¿Recuerdas Sicilia?
Armada solo de un dulce presentimiento
me rescataste
y desde entonces fue tan fácil existir
como ser viento que viene del mar,
como ser esplendor del sol.
Cada vez que te veo
en tu mirada destella
mi única epifanía.
De tu boca un susurro
es un hechizo
que reviste de sentido
a cualquier infortunio.
El valor con el que me lancé al abismo
en tu procura
solo pudo haber sido
la expresión de la fe más pura.
Fui por ti al infierno
y podría volver,
reversaré otra vez el curso de los ríos:
todo lo que sea preciso
para poderte proteger.
Si todo de ti me dieras
no se agotarían tus misterios:
¿cómo vive un infinito
confinado dentro de las fronteras de tu piel?
Resguardémonos en la ciudad del castillo
o ven conmigo a la ladera de la joven cordillera.
A tu capricho seré fiel.
¿Por qué creiste en mí?
¿Por qué me salvaste del destierro?
¿Cuál milagro, cuál delirio,
me ilumino a tu atención?
Ninguna virtud me haría merecedor
del favor de tus caricias,
ningún motivo sería razón suficiente
de tu amor.
Nada se puede comparar
al privilegio de habitar tu calor.
Tu gozo es mi gozo,
tu deseo mi absoluta absolución.
domingo, 12 de noviembre de 2023
Monica Bellucci
Soy un eucarionte, me gustan los quarks y los leptones. Mi vocación es la entropía y mis creencias son intencionales.
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