O / D
Si uno nada mucho tiempo durante el día,
puede llegar a tener en la tranquilidad de la noche
una sensación latente del vaivén de las olas.
Esta noche el silencio ruge,
con un sonido grumoso y eléctrico
de bits graves sobrecargados desgarrándose,
aniquilándose,
amándose con pasión violenta.