domingo, 31 de julio de 2005

[Sin título]

Y me ví transportado,
de repente, nuevamente,
a aquel lugar fantástico que tanto extraño,
pese a ser del todo desconocido para mí.

Seres de agua flotando sobre densas y claras nubes,
y las estrellas negras danzando sobre el cielo matutino...
puntos oscuros sobre pálidas piernas
siguiendo un ritmo libinidoso.

No hay comentarios.: